Yamaha explora la cuarta dimensión

Cuando el compositor holandés Paul Oomen diseñó su nuevo proyecto 4D Sound, contar con las especificaciones técnicas correctas era esencial para garantizar que su concepto se llevara a la práctica con precisión.

Era imprescindible que el sonido fuera nítido y el proceso de gran calidad, razón por la que la se eligió la tecnología Yamaha para la mezcla, gestión y alimentación del sistema.

Paul diseñó 4D Sound como una experiencia nueva y totalmente envolvente en escucha espacial. Dispone de altavoces omnidireccionales colocados en 16 columnas de malla y debajo de una superficie de malla.
Las visitas recorren la estructura tridimensional y disfrutan de las imágenes sonoras acústicas que los rodean, por encima, por debajo y por todas partes. Esto explica la cuarta dimensión: el cambio a lo largo del tiempo, o la velocidad a la que se desplaza un sonido en el espacio.

Al trabajar con el sonido general de Sonostruct~ y con el fabricante de altavoces holandés Bloomline Acoustics, Paul desarrolló una estructura de 16 x 16 x 5 metros, que se puede recorrer hacia diferentes puntos y que montaron seis personas en 8 horas.

Bloomline probó de forma exhaustiva amplificadores de distintos fabricantes para este complejo proyecto. Yamaha demostró que era la mejor opción, con seis IPA8200 de ocho canales elegidos para alimentar a 48 altavoces situados en 16 columnas y nueve XP7000 alimentando los subwoofers montados bajo la superficie de malla.

Además, en el equipamiento de Yamaha se incluye un sistema de mezclas digital DME64N, una consola digital LS9-16, dos MY16-MD64 y tres tarjetas de interfaz MADI MY16-EX. Yamaha también proporcionó una gran experiencia técnica a través del responsable de marketing de sistemas Ron Bakker.

“Además de proporcionar un sonido transparente y complementar el diseño acústico de los altavoces de Bloomline, la relación calidad/precio de los amplificadores hizo que la elección fuera fácil,” afirma Ron.

El sistema, programado por Poul Holleman de Sonostruct~, está controlado por ordenador y todos los altavoces reciben una señal independiente. Todas las señales se distribuyen a los DME64N mediante MADI, que procesa los 57 canales de salida con EQ y limitadores. La LS9 se utiliza para la mezcla de micrófonos externos (por ejemplo, presentadores y DJ) en el ordenador principal y controlar de forma remota los datos MIDI. En toda la instalación se utiliza el reloj interno de la LS9.

“Las características técnicas del sistema abren nuevas posibilidades y perspectivas a la composición con espacio y movimiento, y el cambio de movimientos sutiles a movimientos obvios es de gran relevancia para el oyente,” afirma Ron. “El control y el proceso del sonido, gestionado por la LS9 y la DME64N, hace posible aportar sugerencias para una amplia variedad de espacios virtuales y atmósferas.”

La instalación 4D Sound tuvo su estreno ante el público el 19 de octubre en el Muziekgebouw aan ’t IJ, la sala de conciertos de la bahía de Amsterdam. Además de invitar al público a disfrutar de su atmósfera única durante el día, por la noche se utiliza para los equipos de los DJ y fue uno de los elementos del festival de danza que se celebró durante cinco días en Amsterdam.

Foto, Paul Oomen and Bloomline’s Leo de Klerk

Para más información: http://www.yamahaproaudio.com/europe/es/