Antes había una diferencia muy significativa entre los altavoces hechos para escuchar música con un equipo y los diseñados para producir y mezclar música. Sin embargo, las líneas divisorias entre la escucha creativa y la de consumo se han desdibujado en los últimos años.
Algunos creadores de música han crecido cansados de los fríos y duros monitores de estudio, mientras que algunos entusiastas de alta fidelidad están frustrados de manera similar por los modelos con respuestas de frecuencia dulcificadas artificialmente. Entre los que han reconocido que un buen altavoz puede satisfacer a una amplia gama de posibles compradores están lo señores de Adam. Cuya serie A de monitores de estudio es muy popular entre una amplia gama de productores tanto profesionales como semi-profesionales. Adam considera su nueva gama F, formada los F7′S y los F5′S un poco más pequeños, como monitores perfectos tanto para los productores de música como para oyentes por igual, así como para aquellos que buscan soluciones para cine en casa de sonido envolvente o incluso para los juagadores de juegos más obsesionados con la calidad. Con las dos últimas aplicaciones en mente, la gama F incluye también su propia unidad de sub-graves espacífica, la Sub F (disponible por separado), y de la que el F7 o F5′S pueden actuar como satélites.
El panel trasero del F7 refleja el uso polivalente para el que están pensados, con una entrada XLR balanceada junto a un jack TRS balanceado / no balanceado de entrada, además de un conector RCA no balanceado. Al igual que el potenciómetro de la ganancia (de menos infinito a +6 dB), se proporcionan dos controles de ecualización, con + / – 6 dB de control de tono por encima de los 5 kHz y por debajo de los 300 Hz. Además, si tenemos la intención de utilizar los F7′S con el Subf, se proporciona un interruptor para activar el filtrado de paso alto a 80 Hz. De lo contrario, la respuesta de frecuencia se extiende desde 44 Hz a 50 kHz, y dos amplificadores A / B se emplean para alimentar el woofer y el tweeter respectivamente.
En la práctica, los F7S son impresionantes, ya que ofrece un sonido mucho más cerca de sus hermanos mayores de la serie A de lo que su precio podría sugerir. En la medida que el tweeter nace del mismo diseño que en la serie A, lo que se espera para esta zona del espectro de frecuencias es que ofrecezca un sonido comparable en términos generales. Sin embargo, hemos quedado igualmente impresionados por el extremo más bajo del espectro, que ofrece una fiable solidez . Si bien la zona de frecuencias medias-graves no es tan detallada como la que esperarías escuchar en un par más caro de los monitores, no hay mucho tampoco en esta zona que pueda frenar tus mezclas, o que decepcione al escuchar por simple placer. La imagen estéreo es impresionante y detallada también, y también hay más profundidad front-to-back en la imagen sonora de lo que había imaginado. El sonido en general es muy controlado sin dejar de ofrecer un montón de personalidad, con un tono abierto, cálido y alentador que, sin embargo evita el exceso de dulzor o el maquillaje. Estos monitores logran un buen equilibrio.
Por supuesto, si tu presupuesto se extiende más allá del precio de los F7¡S y estás interesado en el sonido Adam, hay beneficios sonoros en la selección de unos A7X que son más caros, pero que ofrece imágenes más detalladas y una mayor transparencia en la gama media. Sin embargo, las diferencias son más sutiles que se podría esperar, y sin duda sería justo decir que el F7 suena más caro de lo que su precio predice. Si estás oteando en el mercado para comprar un par de monitores de precio medio, sin duda debes considerar seriamente estos modelos.
