Esta revisión de HNMPL vuelve a destacar no solo por el tirón que siguen teniendo los pegadizos temas de Mecano, grupo que supuso un hito y que abrió las fronteras de la música pop española durante la década de los 80; sino principalmente por la revolución que ha supuesto técnicamente.
El excelente trabajo del iluminador Carlos Torrijos ha sido el responsable de esta revolución con su innovadora puesta en escena. Su idea ha sido "mantener el mismo libretto, la misma historia, pero transformarla totalmente a nivel visual".
Torrijos buscaba una cabeza beam que le sirviera a su propósito de "lograr un estilo en el que se mezclaran el teatro y el rock; con escenas muy delicadas y sutiles y una luz muy cuidada por un lado, y escenas muy marcadas de luz y color y mucha intención por el otro". Tras barajar varias opciones, terminó optando por los Pointes de Robe, suministrados por la empresa ASL, siendo ambos los primeros en apostar por los Pointes en un show español.
Junto con los Pointes, Torrijos incluyó toda una línea de Elidys de Chromlech, también suministrados por ASL, cubriendo toda la cara visible de los trusses que fueron utilizados en la escenografía. Además de las pantallas que entran guiadas en escena desde ambos lados del escenario y que giran 360º sobre sí mismas, los vuelos, mapeados y proyectores y escenarios en movimiento.
Tanto los Pointes como los Elidys han sido distribuidos por Entertainment Equipment Supplies (EES), distribuidor oficial de Robe y Chromlech.
Torrijos ha destacado que "utilizar todo este material técnico y unirlo al equipo artístico y creativo para que entre todos consigamos contar una misma historia, y que ésta llegue al público, genere emociones y divierta ha sido el gran reto".
