Miquel Oms siendo uno de los mejores ingenieros de sonido de este País, probablemente también sea uno de los más desconocidos a nivel mediático. Su avanzada metodología de enseñanza así como su centro educativo CRASH Escuela Audiovisual, vinculado a la Universidad de Vic (Barcelona), han servido para que se formaran y reciclaran bajo una sólida base en la materia, muchos de los profesionales del sector del audio tanto de España como del extranjero.
JZ: Puedes comentarnos, Miquel, un poco a cerca de tu incursión en el mundo del sonido ?
M.O: Antes de nada, quería puntualizar que yo no soy más que un aprendiz de brujo que cada día se da cuenta que sabe menos… por tanto, disto mucho de ser un gran ingeniero de sonido.
En realidad, prefiero ir de incógnito, ya que siempre pienso que se puede mejorar lo que hago. Por ello, pido no aparecer en créditos de proyectos, ni impartir “master class” o cosas por el estilo como si fuese alguien importante, porque no lo soy. El sonido, simplemente es mi vocación.
J.Z: Quizás no era la música o algo relacionado con ésta, lo que todo padre quería que estudiase su hijo y, quizás, más en aquella época, por la mentalidad que existía por aquel entonces, ¿No es así Miquel?
M.O: Sí, fíjate, en mi caso mis padres me dijeron: Si quieres estudiar una carrera la tienes pagada, si decides aventurarte en el mundo del sonido tu formación irá por cuenta propia.
Además, mi padre es la cuarta generación de una empresa familiar dedicada a la importación, creada en 1849, en la que l’ “hereu” (el hijo mayor, en Catalunya, o sea, yo) era quien heredaba directamente el negocio, si seguía con él, claro. Por tanto, lo fácil era no complicarme la vida y tener la vida asegurada con unos buenos ingresos.
Yo, gustosamente, cedí el puesto a mi hermano y yo me encomendé al destino.
Tenía claro que en la vida hay que trabajar y ser feliz y que, para cruzar esos dos conceptos, tenía que trabajar de algo que me apasionara. Por un lado, transformaba el trabajo en un hobby y, por otro, podía dedicar el resto de tiempo a otras inquietudes personales vinculadas a la biología, psicología, medicina, volar, submarinismo, etc.
JZ: ¿Qué referencias existían por entonces en España a cerca del mundo de la ingeniería de grabación, y donde se podía estudiar algo relacionado con ello?
M.O: En realidad habían varios referentes, aunque todos ellos eran productores musicales con amplia experiencia como ingenieros de sonido. Si tengo que citar a uno quizás mencionaría a Jesús Gómez (Estudios Doubletronics).
En cuanto a formación estaba, prácticamente, centralizada en EEUU y Reino Unido. La escuela que rápidamente se expandió por otros países fue SAE, de la mano de Tom Misner, un multimillonario que acabó adquiriendo Neve y, por poco, SSL, gracias a que Peter Gabriel y David Engelcke se le adelantaron en el último momento para que no consiguiera el monopolio de las grandes cónsolas. Un gran hombre de negocios, del cual, no comparto sus puntos de vista.
JZ: Algunas de tus experiencias como profesional en cuanto a artistas y proyectos más significativos para ti, en los cuales has trabajado a lo largo de tu carrera?
M.O: Curiosamente, las experiencias más emblemáticas han sido de la mano de artistas muy poco conocidos pero hablando de personas conocidas, un referente para mí ha sido George Massenburg. Quizás ha sido quien, tras buena parte de la formación y experiencia adquirida, me ha aportado nuevas perspectivas. Es un pozo de sabiduría y un placer compartir una producción con él. Recuerdo un día, mezclando con él, con varios músicos sin parar de hablar y reír detrás nuestro, a lo que yo les pedí si podían hablar más bajo y él me dijo: “no, mejor, déjalos que hablen, si podemos crear una buena mezcla con todo ese ruido de fondo será una mezcla mucho más robusta y que funcionará en los entornos más hostiles.”
JZ: ¿Cómo y cuándo decides dedicarte al mundo de la docencia y a la formación de los futuros profesionales del sector del audio?
M.O: A raíz de producir a grupos musicales, cada vez me encontraba a más músicos interesados en que les enseñara lo que yo creía saber del arte de la producción. Llegó un momento en que estaba explicando lo mismo de forma desincronizada a distintos alumnos y pensé que, lo lógico, era crear un curso con todos los alumnos a la vez. Estuve más de 1 año para crear sólo los temarios con sus respectivas prácticas y, a partir de ahí, creé formalmente CRASH Centro de Estudios Técnico-Musicales.
El término CRASH vino del término inglés “crash courses” que significa formación rápida y directa.
Con el tiempo el sonido me llevó a la imagen e hice lo mismo es esta área que la considero el complemento perfecto al sonido. Entonces pasó a llamarse CRASH Instituto Audiovisual.
En esa época, nuestro proyecto fue premiado como a 1 de los 25 proyectos más innovadores en todos los ámbitos por el Departamento de Industria, lo que nos ayudó muchísimos a posicionarnos a nivel internacional.
Por último me dije ¿Por qué enseño imagen desde tierra y no desde el aire, si yo lo hago a nivel personal? e introduje la formación en drones. Últimamente, la Universidad de Vic se interesó para que formáramos parte de su grupo y certificaron nuestra formación como extensión universitaria (expertos, postgrados y masters en cada área) y cambiamos, de nuevo, el nombre comercial a CRASH Escuela Universitaria pero debido a que nos llamaban interesados en estudiar derecho, etc., finalmente lo volvimos a cambiar a CRASH Escuela Audiovisual.
Como ves, lo de los nombres de empresa no es lo mío…
La última aportación ha sido en el área dj, de la mano de un profesor especializado en ello, Josep Cases, ya que si la diseño yo, enseñaría que hay que hacer para vaciar una pista de baile…y ahí estamos.
JZ: Supongo que tu metodología y materia fueron basadas en las carencias existentes en cuanto a lo que existía en cuanto a la formación de profesionales del sector del audio, ¿No Miquel? O fue esto más bien bajo tu propio criterio basado en los conocimientos que crees que debe de adquirir un profesional como base para abordar las distintas áreas del sector?
M.O: Fueron ambas cosas, Julián. A nivel comercial, en aquel entonces había una laguna en cuanto a formación en esa área y, además, enseñar te permite aprender, continuamente, al ir potenciando los temarios diariamente, lo que supone una labor de investigación que el día a día laboral de una producción no te lo permite.
A mí, personalmente, me encanta la docencia. Ver alumnos ávidos de una información que les puedes transmitir conocimientos y que ellos se sienten agradecidos que haberlos compartido; que la aplican; que crean proyectos; ver a algunos de ellos que triunfan, … no tiene palabras para mí.
Los que podemos trabajar de lo que nos apasiona formamos parte de un grupo de personas privilegiadas: trabajamos en algo que nos gusta, nos pagan por ello, vivimos exclusivamente de ello, nos agradecen nuestro trabajo y, en algunos casos, nos premian por el trabajo bien hecho.
JZ: Ciné, doblaje, grabaciónn, edición, mezcla, mastering, diseño de sistemas, sonido en directo etc.… todo ello parece áreas y especialidades relacionadas y semejantes, pero totalmente paralelas entre ellas, ¿No Miquel ?
M.O: Al final, todo tiene un común denominador. Incluso cosas tan distintas como un diseño gráfico, es equiparable a una mezcla. A veces estoy mezclando pensando en un diseño gráfico, buscando los espacios, los elementos dominantes, los pesos, las simetrías y equilibrios, colores, contrastes (sobretodo), etc.
Por tanto, si esto tan distinto es equiparable, imagínate las distintas variantes de una misma área.
JZ: Cuál es la filosofía de Crash, y quizás también la insignia y distinción respecto a otros centros educacionales del País ?
M.O: La verdad es que nunca me ha preocupado demasiado lo que hacen los demás centros por no caer en distorsionar mi objetivo por motivos comerciales. Pienso que el éxito económico de un proyecto ha de ser la consecuencia de hacer las cosas bien hechas, no el objetivo.
Nuestro objetivo es formar a profesionales formados para abordar el mundo laboral con plenas garantías al finalizar sus estudios.
Vista del control principal del Centro de estudios CRASH
JZ: Parece que vuestro criterio siempre ha sido el de estar dotados de muy buen equipamiento en vuestras instalaciones, así como un cuidado diseño acústico en todas las diversas salas de Crash….
Podrías comentarnos así un poco por encima, a cerca de vuestras instalaciones, así como los equipos de audio profesional que residen en estas?
M.O: La idea fue crear un edificio donde se pudiera abordar un proyecto audiovisual completo sin salir de él para poder crear, por ejemplo, todas las fases de una producción musical.
Hay un estudio de pre-producción musical (2,2m de altura y trampas de 1,2m, con control hasta graves altos) con:
- Un control con una Euphonix CS3000 con Cube (surround 5.1)
- Un pequeño estudio, flotado. Es un espacio diseñado para hacer una maqueta del proyecto, es decir, ordenar las ideas, crear, probar, en fin todo lo que se debería hacer antes de iniciar una producción profesional, donde los precios por hora son mucho más altos. Además, se pueden aprovechar secuencias MIDI, etc. que después ya no se deberán volver a grabar.
Hay un estudio de producción musical, flotado, para grabar el proyecto con calidad profesional, con:
- 6 m. de altura y 350 toneladas de materiales acústicos incluyendo 250 Kg de clavos.
- Un control con una Sony Oxford OXF-R3 ampliado con 96 canales con EQ y dinámica de GML (George Massenburg Labs) y opción para doble operador. También hay un Sony 3348HR, un Studer A827 Gold Edition con Dolby SR, etc. monitores 5.1 full range (12”/18” y motores TAD TD-2001) custom diseñados por Philip Newell, como el resto del proyecto acústico del edificio.
- Un Estudio absorbente con acústica variable con piano acústico Disklavier (controlado vía MIDI), guitarras Parker fly de luxe, Martin, un bajo eléctrico con MIDI, amplis fabricados a mano con previo y etapa a válvulas. También hay un Kurzweil K2600S, Virus Polar, batería electrónica de Roland, micrófonos Neumann M149 tube, etc, 7 Cámaras robotizadas Sony HD-SDI.
- Estudio reflexivo con mármol de Carrara con trampa de graves (Sólo reverberan agudos y medios). Batería acústica Sonor.
Hay una sala de conciertos surround 5.1/6.1 para que el grupo pueda presentar su producción a los medios de comunicación, managers y discográficas, mediante una actuación en directo, privada, con sonido de macroconcierto con:
Iluminación espectacular (hazer, barras de leds, par 64, scanners, robotizados wash y spot, bola de espejos, máquina de humo alto y bajo, etc.)
3 Cámaras robotizadas Sony HD-SDI.
1 Cámara con grúa.
o para que un dj realice una sesión en directo con:
Platos giradiscos Technics.
Pioneer Tour 1.
Traktor con X1+F1+D2.
Live + Push.
Roland TR8+TB3+VT3.
El equipo permite controlar la iluminación espectacular y disparar imágenes, efectos, etc en la pantalla de cine, creando un espectáculo multimedia controlado interactivamente por el Dj-Vj.
Esta sala también sirve para post-producción de cine con:
Pro-Tools (Mac)
Icon D-Control con surround pannel.
Pantalla microperforada de 5×3,5 m.
Proyector de mastering de cine 4K y 10000 lumens, Sony SRX-110.
También hay un Estudio de TV para que pueda entrevistarse en directo al productor musical, por ejemplo, y pueda emitirse por streaming a tiempo real a todo el mundo con:
- Plató con croma con 3 cámaras 3D
- Control con mezclador de vídeo Sony con 68 entradas y 48 salidas HD-SDI, para interconectar todo el edificio.
El estudio de fotografía/grafismo sirve para poder crear los recursos necesarios para la portada del disco, por ejemplo, y cuenta con:
- Cámaras DSLR Nikon y de medio formato Contax 645 con respaldo digital.
- Flashes de estudio 500-1500W Bowens.
- Proyectores LED con doble temperatura de color, controlables por DMX, etc.
Que tal es de la Sony Oxford OXF-R3? Siendo un mezclador digital, este sigue siendo un mezclador muy apreciado y valorado..
M.O: Sí, este mezclador tiene un poco de historia. Se fabricaron solo 50 por el coste. El problema de este equipo es que, al discontinuarse, Sony dejó de dar soporte y, prácticamente, no hay ingenieros de mantenimiento en todo el mundo que sepan mantenerlo y repararlo por lo que optamos por formar a nuestro ingeniero de mantenimiento (David Solé) hasta conocérselo de arriba a abajo. En Julio, lo desmonta pieza por pieza para realizarle el mantenimiento correspondiente, incluyendo recaping, etc.
Veo que también has mantenido los grabadores de bobinas analógicas…
M.O: Sí, de hecho, dejaron de fabricarse, no por cuestión de calidad, sino por el mismo motivo de siempre: coste, mantenimiento, precio de las cintas, edición limitada y lenta, … cuando lo usan nuestros alumnos, alucinan con este sonido.
Cuando en digital grabas un bombo, una caja, un charles, unos toms y unos platos, al reproducir oyes el bombo, la caja, el charles los toms y los platos. Si lo grabas en analógico, al reproducirlo, oyes una batería.
Compacta y la compresión y saturación según niveles de grabación permite un juego muy interesante.
¿Cuales son los software DAW con los que soléis trabajar en vuestros estudios?
M.O: Logic para producción musical audio-MIDI, en general, por las prestaciones MIDI de que dispone (y sobre todo por el Environment MIDI); Pro-Tools para posproducción de cine o producciones que solo requieren un MIDI muy básico y Ableton Live para música electrónica/directo para Djs.
JZ: ¿Crees que los plugins han llegado ya a emular decentemente a los equipos outboard? O por lo contrario, aún existe diferencia entre estos?
M.O: Actualmente pienso que todavía es difícil emular lo que ocurre exactamente en cada variación de tensión de cada componente electrónico analógico, incluyendo su tolerancia y aún más la interacción entre todos los componentes de un circuito e, imagínate, con todos los circuitos de un equipo. No obstante, Universal Audio, por ejemplo, tiene plugins que poco les falta… No obstante, que no tenga el sonido igual no significa que pueda ser mejor para una aplicación concreta.
Indudablemente, en un futuro podrá ser exactamente igual pero, ¿Para qué? A fin de cuentas queremos mejorar lo existente.
Yo pienso que, de la misma forma que la verdad no existe, no existe el audio perfecto. Todo son interpretaciones de esa “verdad” oculta.
Un transductor de un micrófono de bobina móvil crea una interpretación de unas ondas sonoras, uno de condensador, otras. Si éste, además, está preamplificado a transistores o válvulas, otras. Un grabador analógico de cinta, convirtiendo variaciones de tensión a campos magnéticos, otra. Un convertidor PCM, otra. Y así, conseguimos tantos colores como sistemas de transducción haya, añadiéndole las variantes de cada modelo concreto. Entonces solo se trata de tener la base de dados más extensa posible en nuestra corteza cerebral para poder seleccionar el equipo adecuado para conseguir el “sabor” que buscas, como productor, en grabación, mezcla o mastering.
Por ello, para mí, es imprescindible que un productor musical, antes, debe ser ingeniero de sonido y si, además, fuese un gran ingeniero electrónico y, además, tuviese buenos dotes de psicología, bueno, esto sería lo más parecido a Dios.
JZ: ¿Qué bien que se haya echado por el momento el “ ancla” en un sistema “standard” en la industria de los sistemas de grabación actuales basados estos desde hace ya unos cuantos años en los
sistemas DAW, evitando que la industria y los diferentes fabricantes estén continuamente sacando al mercado nuevos formatos y soportes como ocurría en ese periodo de “ transición” de finales de los 80´s y durante los 90´s, ¿No Miquel?
M.O: Sí, fíjate, en la era analógica todo era compatible con todo (exceptuando los formatos de grabación), incluso hoy. En cambio, en digital todo es incompatible con todo.
No obstante, bajo mi punto de vista, el futuro será totalmente digital, basado en redes de audio inalámbricas y procesado por ordenadores cuánticos.
JZ: ¿Crees que se llegó al mejor formato posible o quizás los sistemas analógicos aún tendrían que haber aguantado unos cuantos años más…?
M.O: El analógico de calidad tiene un sabor que, difícilmente, se puede comparar a sistemas digitales que lo emulen a no ser que sean de muy alta gama.
Un equipo digital basado en software usa más o menos CPU según la carga de datos de ese instante (funciones y plug-ins a tiempo real, número de pistas); el nivel de fragmentación de la RAM, la cantidad de programas abiertos y procesando simultáneamente, todo ello puede crear pequeños fallos de sincronización entre los datos, creando un jitter, audible.
En un equipo basado en hardware, analógico o digital, la carga es constante y, por tanto, es estable.
Nosotros hicimos una prueba solo reproduciendo las 48 pistas de un proyecto en Pro-Tools (Mac) y el mismo proyecto en el Sony 3348HR (Hardware), ambos con la misma mezcla a través de la Sony Oxford. La prueba auditiva fue que la mezcla estaba quieta en el Sony y la imagen estéreo fluctuaba en Pro-Tools. Pequeños cambios de fase, repercuten, auditivamente, siempre y cuando la acústica de la sala de control permita captar esos detalles. De ahí la importancia de disponer de acústica controlada.
Los monitores inteligentes son los primeros en crear problemas por el mismo motivo. Los diseñadores lo saben pero el departamento de marketing de los fabricantes se los exige.
Nos hemos pasado al software porque prima la practicidad y el coste, antes que la calidad. El problema es que cuando escuchas una grabación lo haces con los oídos, no con los ojos.
El hecho por el cual tenemos una Sony Oxford, un Sony 3348HR y un Studer A827 Gold Edition es justamente porque son equipos hardware de alta gama, estables, con los que se han grabado los mejores grupos en su momento. Si estos equipos no dan la talla suficiente no es por cuestión de calidad sonora si no porque la composición musical, la mezcla técnica y/o la artística no funciona.
JZ: Antes, con pocos y limitados medios de grabación, pero con grandes músicos, productores e ingenieros se realizaban grandes trabajos, en la actualidad parece que, a pesar de disponer de los mejores equipos e información técnica a nuestra disposición, se está retrocediendo en la calidad en muchas de las actuales producciones comerciales y no tan comerciales, ¿Qué opinas acerca de todo ello, Miquel?
M.O: Antes, los grandes estudios no tenían competidores porque no podías realizar una
producción importante si no disponías de una inversión brutal en infraestructura técnica.
La incesante bajada en los precios de los equipos ha hecho que, hoy en día, cualquier persona que tenga un ordenador pueda hacer una producción (sin entrar en términos de calidad) y se llama, a sí mismo, productor. Esto es lo mismo que decir que cualquier persona que compra un tubo de pintura al óleo y un pincel es pintor.
Ello significa que lo que diferencia a un “productor” de otro ya no son los equipos sino la destreza, los conocimientos, la experiencia. Esto es lo que realmente lo distanciará de su competencia.
44.1khz/48khz/96khz/192khz. 16bits/24bits/32bits/64 bits… hace falta tanto a la práctica?
M.O: Lo que sí es importante y audible es un buen clock… Puede sonar mejor un convertidor a 44.1 kHz que uno a 192 kHz si el primero es mucho más estable que el segundo.
En general, claro está que cuanto mejor sea la tecnología más potenciará el tema.
Pero estamos a un nivel de calidad que para poder oír diferencias lineales debemos realizar inversiones exponenciales.
Yo pienso que el peso más importante de una producción recae en la composición musical del tema. Si un tema es bueno, tiene que estar muy mal grabado y mezclado para que no funcione. Un tema que solo se mantenga por su calidad de sonido, está en peligro de extinción.
Otra cuestión son los estándares que piden las discográficas, el número de seguidores que tienes que tener para que te pasen un tema por la radio, si lo promociona un influencer y todos estos parámetros actuales, símbolo de la misma degradación que comentaba.
Bajo mi punto de vista la calidad no tiene modas ni está influenciada por dichos términos.
Por ello, creo que lo importante es saber diferenciar el grano de la paja y esforzarnos en adquirir una cultura musical correcta.
JZ: Luego tenemos el mp3 como formato “standard” en la red, la gente escucha la música a través de los dispositivos móviles o los altavoces incorporados de los ordenadores, reducidos auriculares así como los distintos dispositivos actuales….
M.O: Sí, desde que la inició la “involución”, o sea:
… > MP3 > piratería > caída de las ventas en discográficas > Extinción de los grandes estudios en todo el mundo > Incremento de project y, sobre todo, home studios > monitores procesados digitalmente > acústica mediante software > …
la industria rápidamente ha aprendido que cuanto más barato fabricas a más bolsillos llegas y hemos pasado de la cadena de música que nos regalaban cuando nos casábamos en la que cada componente costaba un dineral a un receptor bluetooth con un mini altavoz, por 30€.
Ello lleva a que las nuevas generaciones no tienen una referencia con la que comparar y se conforman con ello y esto es un problema. Una frase típica cuando nos visitan y les pasamos un tema en la sala de control es:
- No sabía que existía ese sonido (Si es una buena producción).
- Vaya creí que este estudio sonaba mejor (Si es una mala producción).
y es que, en realidad una sala de control es un laboratorio acústico. Lo que debe de sonar es la “realidad” que hay en los cables que llegan a los altavoces.
JZ: La música comercial actual me suena toda muy igual. Pienso que quizás, ésta, dentro de 20 años, pasará como ocurrió en la década de los 80´s, donde se encasilló una época por el tipo de producciones y sonido tras la incursión y abuso de el sonido de los sintetizadores. Crees que es quizás esto debido al tipo de técnicas que se están empleando en la actualidad, empleando los mismos plugins, tipo de procesamiento de las señales y un abusado y pronunciado proceso de mastering?
M.O: Los expertos dicen que vamos a ver los mismos cambios en los próximos 20 años que en los 2000 años anteriores. No obstante, este tema, si quieres podemos abordarlo en otra ocasión ya que hay un cambio de paradigma en todo, disparado por el transhumanismo, incluyendo el rejuvenecimiento y la a mortalidad previstas para dentro de muy poco…
En general, todos los sectores, no solo el musical, matan la creatividad. Los propios sellos saben que hay una fórmula que vende y si tu proyecto no sigue el mismo patrón, no lo quieren. ¿Para qué arriesgarse a algo nuevo, de calidad, interesante? Al final lo que importa es solo el dinero.
Pienso que hay que despertar… no hemos de ir todos a donde el sistema nos quiere llevar. Vayamos al origen, sin términos tergiversados por propósitos económicos.
Tengamos claro qué queremos comunicar. Coloquemos los elementos compositivos estrictamente necesarios escogidos para que cubran una función muy concreta. No pongamos florecitas gratuitas (esas notas de más para que vean qué virtuoso soy), no llenemos los espacios si se requiere aire (silencios=dinámica). Cada nota debe tener una función, no puede haber ni una más y debe ser esa nota y no otra para que consiga transmitir esa sensación al oyente, fruto de la interacción con el resto de notas y líneas en cada posición de tiempo.
Comento esto porque, como piloto, la lección más importante que aprendí es que la pieza que en vuelo no falla es la que no está.
JZ: Que opinas de todo este gran negocio en el que se está convirtiendo el sector del audio profesional, en el cual los distintos fabricantes nos inundan a base de una continua renovación de productos, donde en la actualidad parece que son los humanos los que están a merced de las máquinas/equipos, convirtiéndonos quizás más en unos autómatas y operarios de las diferentes interfaces y funcionalidades de los diferentes equipos y marcas de los fabricantes, distanciándonos de esta manera en la creatividad y el proceso de “ artesanía” de los orígenes de nuestro trabajo…
M.O: Pienso que también tienes razón. Mira, nuestro slogan es: “hacemos de la producción un arte sin dejar que la tecnología nos absorba la creatividad“. Dicho de otra forma, los equipos son solo los recursos necesarios para crear el proceso creativo que tenemos en mente. Ósea, primero hemos de inventar algo y después pensar como llegar a ello.
Claro está que hay otra fórmula que es experimentar que, aunque es igual de válida, no forma parte de mi forma de trabajar. Yo intento entender que hago y porque lo hago.
Respecto al tema equipos… pienso que hemos de intentar no ser víctimas del marketing. Según nuestros conocimientos debemos comprar una cadena de audio a ese nivel, en cuanto a calidad y número de parámetros. No mezclar equipos buenos con malos porque la calidad final de la cadena será la del peor equipo y ello, se traduce en dinero tirado. Debemos ir a la tienda a comprar, no a que nos vendan y eso solo se consigue con información. Y digo tienda por que el sonido hay que oírlo antes de comprarlo. Olvidémonos de comparativas y compras a ciegas por internet, que es lo que quiere el sistema, otra vez.
1- Empieza por probar el equipo más barato.
2-¿Tu oído capta su calidad? ¿Es suficiente para tí?
3- ¿Lo sabes configurar para llegar al sonido que buscas?
4- Si es así, cómpralo. Si no, prueba el que está justo por encima de precio y empieza el cuestionario de nuevo.
Cuando lleves un tiempo y te des cuenta que esos equipos ya no te dan la calidad necesaria, es hora de volver a la tienda, quiere decir que has evolucionado. Aunque puede parecer que esto es tirar el dinero es justo lo contrario.
Los equipos bajan de precio continuamente y se necesita tiempo para estudiar y educar el oído.
JZ: En un mundo tan subjetivo como es el del sonido, crees que el hecho de poseer un don en cuanto a un buen oído y gusto a la hora de, por ejemplo, mezclar música, es algo que ayuda mucho en todo, o por lo contrario, es algo en lo que se puede trabajar durante solo unos años en la profesión?
M.O: De hecho, a partir de los 20 años empezamos a tener pérdidas auditivas en agudos, a nivel fisiológico. A los 40 años la alta fidelidad es, simplemente historia. Si nos vamos a los 60, ya te puedes imaginar, para un ingeniero de sonido…
Por este motivo, creé un centro, llamado MedicinaModerna.eu donde, entre otras cosas, atenuamos o eliminamos los acúfenos (tinnitus) y estamos inmersos en un proyecto de investigación sobre la recuperación de pérdidas auditivas, basándonos en la regeneración de las células ciliares de la cóclea. Para mí, estos son los dos problemas más importantes para los ingenieros de sonido de todo el mundo.
Personalmente, a cierta edad, soy partidario de mezclar con la ayuda con alguien joven, experimentado y con buen criterio a no ser que mezcles un estilo enfocado a un perfil de tu misma edad, con las mismas pérdidas auditivas que tu. En tal caso, lo que yo hago (Tengo 52 años) es filtrar los agudos en grabación del master y monitoraje, coincidiendo con mi respuesta en frecuencia. De esa forma se que no estoy añadiendo más agudos de los que yo puedo captar y puedo hacer una mezcla basada en mi oído, compatible con todas las edades.
JZ: Con todos los muchos centros educativos de sonido del país que existen en la actualidad, crees que hay cabida y demanda de profesionales en el actual mercado laboral?
M.O: Yo creo que el problema no es si hay suficientes puestos de trabajo, sino quién conseguirá los puestos de trabajo que ya existen.
Nadie tiene un trabajo fijo (es distinto que un contrato indefinido) a no ser que seas funcionario.
Pensemos algo, una empresa es muy lógica, solo entiende una palabra: rentabilidad y sabe que la persona mejor formada es la más rentable. Ello significa que, si un estudiante demuestra a un empresario que puede conseguir mejor calidad de sonido que uno de sus operarios, su objetivo es intentar contratar al nuevo y despedir al anterior. Si no, otra empresa lo hará.
Por tanto, creo que lo importante es formarse al nivel más alto y esto solo se consigue con un programa de estudios enfocado al mundo laboral y practicando en las instalaciones de más alto nivel posible.
JZ: Tú que has pasado por tantos cambios en la industria, que opinas de toda esta revolución que ha supuesto internet? Donde toda información parece válida, todo el mundo opina como “ experto” y donde la industria ha puesto de manera asequible que cualquiera pueda llegar a autoproclamarse“ técnico de sonido” o “ingeniero de grabación”.
M.O: Internet ha traído muchas cosas buenas: búsquedas rápidas, inmediatez, datos, comunicación en red, etc. pero, como todo, también tiene su lado oscuro, ya que es tierra de nadie: avatares, influencers, ¿será publicidad?…
Ante este escenario, lo más importante no es encontrar información sobre un tema sino saber la credibilidad de la persona que ha publicado esos datos.
Por ejemplo, si me interesa saber la opinión de un experto en un tema de acústica, primero buscaré a Philip Newell, por ejemplo, y después el dato que yo busco y no al revés.
Por tanto, pienso hay que empezar por saber quienes son los referentes de cada sector.
JZ: ¿Es quizás en esta época de pleno intrusismo laboral, donde los conocimientos que adquiere un profesional son relevantes a la hora de interponerse ante cualquier músico o aficionado el cual incluso pueda llegar a poseer un gran equipo mejor que el nuestro ya sea en su “home studio “de su casa o bien estudio de grabación privado?
M.O: Para mí, lo que vale es el resultado final. Nos podemos encontrar a alguien con unos dotes creativos que, sin estudiar nada, consigue el resultado esperado y otro que ha estudiado muchísimo y no consigue combinar adecuadamente los recursos por no explotar su lado creativo.
Lógicamente, si al primero le sumamos la información que tiene el segundo, conseguimos crear a un crack.
JZ: ¿No es la cocina, sino el cocinero ( equipo vs conocimientos) los ingredientes ( calidad de músicos/artistas)…quizás la suma de todo? ¿Qué opinas acerca de ello, Miquel?
M.O: Pienso que cada uno forma parte de un todo, genérico, como te comentaba antes. Te pongo un ejemplo culinario ya que así me lo pides:
Al diseñar una ensalada, estamos buscando como combinar sus parámetros: olor, colores, texturas, temperaturas, dureza, si es crujiente, dulce, salado, ácido, agrio, al igual que cuando realizamos una mezcla.
Puedes crear una ensalada buscando quien es el solista, quienes lo acompañan, qué se usa de fondo, que sensación quieres transmitir y vas combinando elementos hasta hallar la mezcla deseada.
No es lo mismo echar sal a toda la ensalada que colocar una aceituna. La sal es un fondo y la aceituna un solo, por ejemplo. Y empiezas a comerte la ensalada según el guión. Puedes empezar con una introducción, con lechuga, aceite de oliva y un toque de vinagre, evolucionar a una estrofa, además con tomate que le da color y un punto de acidez, etc., que pasa a un puente que crea una sensación agria para que pida relajarlo cuanto antes (pepinillo y cebolleta) para entrar en el estribillo con unos picatostes (percusivos) con atún (sabor fuerte) combinado con huevo caliente (a medio cocer) con aceite de oliva y un toque de sal, pasando a un solo con aceitunas rellenas que va descubriendo el sabor a anchoas y acabas con un fin, suavizando de nuevo con lechuga con pimiento rojo y maíz cocido para que deje un sabor dulce y colorido al terminar.
¿Se te ha puesto la boca agua? Este era el objetivo.
Ah, y por descontado, tv cerrada y tras pinchar con el tenedor, ojos cerrados, sino gran parte de la información se disipa por la vista y se dispersa el olor y el gusto.
Fíjate que para hacer una buena ensalada no usas los mejores ingredientes sino la mejor combinación de ellos. ¿Te imaginas una ensalada con jamón ibérico, salmón noruego y caviar ruso? ¡Incomestible!
En una mezcla de un tema ocurre lo mismo.
Quizás, a partir de ahora, alguien va a ver a una ensalada con otros ojos… Ja, ja.
Como te comentaba, para mí, todo es genérico y aplicable a cualquier ámbito.
JZ: Cual es tu consejo para todos los jóvenes que quieren adentrarse en la formación como futuros profesionales del sector profesional del audio?
M.O: Primero que se pregunten si el sonido es realmente su pasión, porque para ser bueno en una área hay que dedicarle muchas horas y esto solo puede llevarse a cabo con mucha dedicación.
Si es así, todo lo demás irá llegando por consecuencia de lo primero.