En los tiempos actuales, es más que evidente que nos enfrentamos a un proceso de cambio climático a nivel mundial, que nos afecta directa o indirectamente en muchísimas cuestiones de la vida diaria, y en todas las acciones sociales y empresariales que se desarrollan en nuestra sociedad. Son múltiples los aspectos que condicionan nuestra forma de ejecutar acciones hasta la actualidad, y en todos los planteamientos que se desarrollen en el momento en el que se barajan cualquier actividad que se localice en medio de un entorno natural.
En nuestro sector y en la gran oferta de eventos que existe en nuestro país, son cada vez más los promotores y productores que apuestan por eventos que comiencen a innovar en su estructura, planteamiento y ejecución, respetando el medio ambiente, promoviendo prácticas sostenibles y saludables, y creando el mínimo impacto en el entorno en el que se desarrolle. Son los eventos sostenibles, un modelo de producción de eventos que no es nuevo pero que, si ha llegado para implantarse en todas las acciones que se ejecuten, y también para quedarse definitivamente.
Desde hace alrededor de 2 años hasta día de hoy, la sociedad ha ido cobrando conciencia sobre el impacto que causa nuestra actividad en el medio ambiente. Las distintas catástrofes que se van sucediendo en el mundo, ligadas al impacto del cambio climático y la acción humana en zonas altamente sensibles medioambientalmente, han desembocado en acciones y nuevas fórmulas de gestión que comprometen a todos los sectores económicos inmersos en la economía mundial, y más específicamente en los distintos mercados económicos de distintos países.
La problemática de los eventos que no apuestan por la sostenibilidad es básica; Alta cantidad de residuos, elevado consumo de energía, agua y alimentos, generación de contaminación atmosférica, contaminación acústica y lumínica, aumento del riesgo de accidentes y una mayor degradación del entorno.
En nuestro sector, y concretamente en lo que concierne a la ejecución de eventos de gran repercusión, celebrados además en exterior, el público ha ido tomando conciencia al respecto, y aún más los propios gestores que presionados por distintas entidades, organismos reguladores y nuevas leyes, decretos y manifiestos, han tenido que replantear todas sus infraestructuras, proveedores y fórmulas de atracción, para no solamente demostrar a sus clientes (espectadores), la innovación, originalidad y compromiso con el medioambiente, si no también para representar un nuevo modelo de gestión que debe por obligación y lealtad con el medio ambiente respetar el entorno y la preservación de ecosistemas y zonas sensibles.
Es obligatorio, luchar por el mínimo impacto, por el replanteamiento de materiales de fabricación de merchandaising, gestión de residuos, emisiones de combustibles, utilización de materiales sostenibles de infraestructura, acciones de concienciación, y otros aspectos que definen un evento sostenible. No obstante, un evento sostenible, implica más aspectos que conllevan un compromiso social y económico.
Según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), un evento sostenible, es aquel evento diseñado, organizado y desarrollado de manera que se minimicen los potenciales impactos negativos ambientales, y que se deje un legado beneficioso para la comunidad anfitriona y todos los involucrados.
Para ser exactos, ¿qué aspectos positivos conlleva los eventos sostenibles?:
• Reduce de forma real, su impacto social y ambiental negativo.
• Da un valor añadido humano y medioambiental al evento.
• Ahorra dinero, tanto a la organización como a los participantes.
• Apoya a la economía y al empleo local.
• Cambia nuestra relación con el Planeta, tanto de los participantes como de los proveedores y patrocinadores.
• Posiciona y aporta buena imagen al evento, marca o empresa.
• Refuerza la relación con clientes, patrocinadores y participantes.
• Crea vínculos emocionales evento-medio ambiente-organización.
• Inspira la innovación y la creatividad tecnológica y de gestión.
• Demuestra que otra forma de hacer, es posible
Un Bien común, atraer, economizar, adquirir un compromiso, sensibilizar y educar, diferenciar, fidelizar, cohesión, eco-soluciones y responsabilidad.
Esta demostrado que, en nuestro trabajo a la hora de plantear, desarrollar, producir y ejecutar un proyecto de estas características, las posibilidades de éxito son considerables y más seguras cuando trabajamos en limar cada aspecto y capítulo de nuestra propuesta.
Además, existe un aspecto favorable; contar con un proyecto perfectamente estructurado, desarrollado y justificado, hace aún más cómoda la gestión de permisos y distintos certificados para la viabilidad y visto bueno de las distintas entidades que regulan estos aspectos. Existe una predisposición y especial atención en el recibimiento de propuestas de estas características, ya que estamos en tiempos en las que las distintas autoridades y organismos reguladores reclaman con urgencia que cualquier proyecto de evento o propuesta social, incorpore estos principios con una base sólida, bien estructurada y perfectamente justificada y documentada.
¿Qué aspectos son básicos para el planteamiento y creación de eventos sostenibles?
• Reducir, reutilizar y reciclar los residuos
En la actualidad, disponemos de una variedad de proveedores que pueden sugerirnos elementos fabricados con materiales que fomentan la sostenibilidad y el reutilizado de envases, creando un mínimo impacto y una implicación en forma de interacción con el público, a raíz de la concienciación y las buenas prácticas.
• Disminuir el consumo de energía y agua
No es necesaria grandes infraestructuras y demasiados elementos que dependan de energía y abastecimiento de agua. Existen muchas fórmulas y planteamientos que se pueden implantar en las distintas áreas o partes de la producción. Puede ofrecerse mucho, siendo eficiente.
• Favorecer la movilidad sostenible
Apostar por un modelo de movilidad que fomente el uso del transporte público o de elementos que constituyan una apuesta por las 0 emisiones y que, además vayan de la mano con los hábitos de vida saludable.
• Evitar la contaminación atmosférica
Cualquier forma de combustión, ya sea por servicios derivados de restauración, por elementos de infraestructura y energía como son los generadores o incluso la movilidad In situ del personal con vehículos que emitan CO2, ha de estar bien estudiada y evitar en la medida de lo posible cualquier forma de contaminación posible, es primordial para la catalogación y certificación de un evento de estas características.
• Evitar la contaminación acústica y lumínica
Es esencial respetar la legislación vigente en materia de ruido e iluminación, en cualquier caso. Además, reducir el plano de iluminación y una distribución eficiente y la reducción de presión sonora a través de sistemas que calibren digitalmente estos aspectos, es otro punto a favor para lograr un correcto cumplimiento. Para crear un buen ambiente, no es necesario apostar por montajes con un alto número de elementos, siendo la dispersión lumínica otro punto más a tener en cuenta, apostando por sistemas que eviten este aspecto, y una altura de trust o varas que favorezca esta cuestión.
• Distribuir alimentos sanos y responsables con el medio ambiente y la salud
Alimentos específicos, menús o cualquier otra fórmula de restauración es importante. Como evento sostenible no solamente se pretende ser sostenible y eficiente en cuanto a estructura, consumo energético y gestión de residuos. También es importante la calidad y el hábito saludable que se pretende difundir sobre los alimentos que se ofrezcan. Apostar por modelos de restauración que fomenten el cuidado personal, la salud, el mercado ecológico y el apoyo a la agricultura, es el nuevo modelo a seguir, creando cohesión entre sectores.
• Proteger el hábitat de animales y plantas
Cualquier fauna y flora inmersa en la zona en la que se ejecute el proyecto, debe ser preservada para minimizar el impacto que pueda causar la celebración de un evento. Reforzar este aspecto con talleres, charlas o acciones de voluntariado, añade credibilidad, innovación y criterios que serán ejemplarizados y dinamizados por parte de los participantes, los organismos colaboradores y la opinión pública en sí.
• Sensibilizar a las personas asistentes acerca del respeto a su entorno
La concienciación en el hábito de las buenas prácticas y el respeto por el entorno y el impacto que causamos en el mismo, es básico para fundamentar un proyecto de estas características. Demostrar la capacidad de producción de una organización en concreto para movilizar a distintos grupos, personal o colectivos ligados al medioambiente es una asignatura pendiente aún hoy en día, pero que comienza a tener sus primeros resultados. A medida que aumente el número de proyectos de estas características, iremos observando una sociedad mucho mas concienciada y preparada para afrontar los retos que están por venir. No hay mayor garantía como proyecto, que su credibilidad a la hora de plantear sus fundamentos, visión y misión partiendo de iniciativas y un proyecto social bien planteado, estructurado y organizado.
• Comunicar a la sociedad en general el valor y repercusión de un evento sostenible.
Todas las acciones, la misión como proyecto y los resultados obtenidos, deben ser mostrados a la sociedad en general para ejemplarizar sus características, fomentar sus valores y captar además de fidelizar a un público, que no solamente se sienta identificado con su política, sino que además atraiga a nuevos espectadores, realizando una implicación de la sociedad, fomentando valores como el respeto y la tolerancia, y ofreciendo un legado económicosocial que beneficie a todos, en concreto a la localización escogida. Uno de los principios básicos de un ejemplo sostenible.
Cabe recalcar que la apuesta por eventos de este tipo, abre un panorama muy interesante de gestión y documentación. Acceder a certificaciones como ISO 20121, que regula la norma de sostenibilidad en evento y su certificado como tal y a REDES (Red Estatal de Eventos Sostenibles), abre un marco amplísimo para poder dotar el proyecto de un número indeterminado de posibilidades, ampliando y añadiendo calidad a la propuesta, e innovando en su ejecución de producción y gestión.
A nivel técnico, muchos lo verán como un reto, pero para nada es así. Técnicamente, implica apostar pos sistemas sonoros, que sean eficientes en recintos exteriores, y que equilibren aspectos de presión sonora y dispongan de una alta disipación del ruido por Metro alejado del escenario. Hoy en día, existen sistemas que, dada su alta tecnología y calidad, ofrecen sistemas envolventes para evitar cualquier contaminación sonora a los alrededores del espacio.
En cuanto a iluminación, lo único que implica son las alturas y la colocación de los distintos elementos en el escenario, aspecto que, si se usa a favor de la producción, nos da la posibilidad de crear un espacio escénico personalizado e innovador, en el que podemos demostrar técnicamente y en cuanto al diseño de iluminación que un escenario de un evento sostenible, nos aporta nuevas posibilidades de creación. Esto implica elementos de atrezo, un diseño corporativo, nuevas infraestructuras de trust con formas inéditas, y un acotamiento en altura del escenario más cálida y reducida. Menos, sin duda, puede ser más cuando se trabaja con el concepto adecuado.
Es irremediable la utilización de cualquier generador que apoye el consumo energético del montaje, pero si es muy importante apostar por sistemas que propongan consumos reducidos, emisiones altamente reducidas y un número reducido también de estos sistemas, dejando parte del consumo a cualquier acometida de apoyo que pueda localizarse desde un inicio.
Para finalizar y con el fin de puedan documentarse de una forma más completa y extendida, les facilito las siguientes publicaciones y fuentes de información.
Manual de Eventos Sostenibles, Fundación Biodiversidad
Publicación sobre principios establecidos para la catalogación de evento sostenible, 2019. (www.eventossostenibles.org)
Guía de Eventos Sostenibles, Bilbao Port
Publicación sobre distintos aspectos para la estructura y organización de eventos sostenibles, 2017.
Fundación Biodiversidad, 2019
Fundación Oxígeno, 2019
Ministerio de Medio Ambiente y Transición Ecológica, 2019
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