Se ha empleado un micrófono Ambeo VR Mic de Sennheiser en la grabación del vídeo bautizado como “espacios latentes #01” Dentro de la 5ª edición del programa “CAAM Sonora” cuyo objetivo es acercar al público el arte sonoro, que se celebró el pasado día 22 de septiembre, la creadora Paloma Carrasco López, en colaboración con el técnico de sonido Ernesto Santana
Micrófono Ambeo VR Mic de Sennheiser, la herramienta perfecta
Dentro de esta edición, el 22 de septiembre, la creadora Paloma Carrasco López, en colaboración con el técnico de sonido Ernesto Santana, presentará en vídeo su propuesta bautizada como “espacios latentes #01” para cuya grabación se ha empleado un micrófono Ambeo VR Mic de Sennheiser.
Magnetron, como distribuidor oficial de Sennheiser en España, no ha querido dejar pasar la oportunidad de conocer las impresiones de ambos respecto a uno de los micrófonos más exitosos de la firma como es el micrófono Ambeo VR Mic de Sennheiser.
- ¿En qué consiste “espacios latentes#01”?
PALOMA. Es un proyecto que plantea una serie de grabaciones sonoras espaciales (y visuales, como soporte al audio) dibujadas por mi movimiento con el violonchelo por cada sala o espacio de improvisación. La idea es registrar tanto el sonido del movimiento y el gesto en el espacio como el sonido del instrumento en distintas localizaciones y en interacción con el espacio, así como el sonido del espacio en sí mismo como contenedor de la acción. Busco ir coleccionando una serie de grabaciones de “audio 3D”, apoyadas (o no) por la grabación de vídeo, dejando así una serie de registros sonoros que evoquen cada espacio en el que improviso con esta intención de hacerlo sonar y latir a través de mi acción. Tras cada sesión de grabación, propongo además una improvisación abierta en vivo en la misma sala o espacio, en interacción con la grabación realizada.
“espacios latentes #01”, que es la primera acción del proyecto, funde el trabajo de registro con el de improvisación abierta en vivo, adaptándose así al formato de esta edición de “CAAMSonora” como acción sonora online para su programación.
- ¿Qué os impulsó a hacer una grabación de este tipo?
PALOMA. Hace años que centro mi trabajo como improvisadora en la exploración de sinergias entre sonido y movimiento, música y danza. Mi proceso ahora está inmerso en escuchar cómo el movimiento y la interacción con el espacio pueden llevarme a espacios de creación sonora ampliados, que beben de la inagotable singularidad de cada espacio contenedor de la práctica. Desde la práctica misma me surgió la idea de intentar captar y ofrecer esta manera de escuchar el espacio y de crear música a través de mi movimiento y el del sonido en relación con el espacio en el que sucede. Me atrae simplemente la idea de generar esta serie de grabaciones como testigos de este proceso, y quién sabe si como algo más… también me gusta mucho la idea de colección de improntas sonoras de todos los espacios/momentos que pueda ir haciendo latir… Aún no sé muy bien hacia dónde lleva este camino, pero tengo el impulso claro de querer transitarlo.
- ¿Habíais trabajado antes con el micrófono Ambeo VR Mic de Sennheiser o con algún otro producto de la firma?
PALOMA. Es la primera vez que “trabajo con” un elemento técnico concreto como parte significativa en la creación del concepto de proyecto. Hasta ahora no habían sido utilizados más que como medios para sonorizar, grabar, etc. Nunca había grabado antes con un Ambeo.
- ¿Por qué elegisteis Sennheiser y por qué Ambeo VR Mic?
PALOMA. Este proyecto, por lo que me propongo con él conceptualmente, requiere de una atención específica y muy concreta a todo el trabajo técnico sonoro que lleva detrás. Ahí es donde vi imprescindible trabajar con un técnico de sonido, Ernesto Santana, que además es músico, improvisador, y conoce muy bien las particularidades de esta música. Él fue el que me propuso utilizar el Ambeo para lo que yo tenía en mente. Estoy muy contenta con el resultado. La idea del proyecto es explorar también todos los medios técnicos posibles para desarrollarlo. El Ambeo ha sido la primera elección, que aún queremos “estudiar” en más situaciones y/o localizaciones.
Para la captación en directo, usé únicamente el Micrófono AMBEO y un grabador multicanal con monitorización ambisonics como es el ZOOM F8.
Posteriormente, obtuve una señal binaural partiendo de las señales del micrófono Ambeo VR Mic usando un plug gratuito. Un toque de mastering y ya disponemos de un audio estéreo binaural para incluir en el video que editó Paloma Carrasco.
- Paloma, tú eres muy activa en la escena de improvisación libre madrileña. ¿Cómo estáis afrontando estos meses tan duros desde la irrupción en nuestras vidas de la pandemia?
PALOMA. La verdad es que, como imaginarás, todo está bastante paralizado. Aunque surgen nuevas formas y formatos, creo que nada es comparable a la viveza de la interacción real, y menos en la improvisación libre… aunque hay muchas ganas de retomar, y tratamos de que no se apague la llama. Por Madrid, pasaban bastantes improvisadores de fuera, además de suceder diversos ciclos regulares que mantenían vivo el tejido local. Tampoco es fácil reunirse ahora para organizar sesiones caseras. Toda esta actividad, esencialmente colectiva, ha disminuido enormemente.
El centrarme en un proyecto como “espacios latentes” me ha ayudado mucho a no perder el contacto con mi actividad creativa, que sí está más mermada en lo más colectivo. Lo esbocé en Junio de 2020 y ha sido en noviembre, gracias a la invitación para el ciclo de “CAAMSonora”, cuando he lanzado la primera acción de este: entonces lo puse en marcha y grabé “espacios latentes #01” (que se publicará el 22 de septiembre). Estos días también he recibido invitación a participar en el ciclo “ESCUCHA! Valencia”, por el colectivo “Diàleg Obert”, y he propuesto “espacios latentes #02”. Si todo sigue adelante, esta acción incluirá las dos fases por separado: la grabación en el “Teatre El Musical” y, al día siguiente, la improvisación en vivo en interacción con el registro sonoro previo del espacio.
La velocidad de implementación de proyectos y su volumen han bajado considerablemente; el frenazo en seco impuesto por la pandemia supuso muchas cancelaciones, aunque la escena trata de recomponerse y reinventarse inagotablemente. Es curioso que hace un año, antes de todo esto, yo sentía que quería bajar mi ritmo y fui cerrando algunas colaboraciones para centrarme con más profundidad en menos cosas, buscando una mayor coherencia con todo aquello en lo que realmente quería profundizar. Y es curioso que, después del shock del frenazo forzado, me encuentro agradeciendo esta pausa o cambio de ritmo, tranquila con habitar este momento menos vertiginoso y disfrutando lo que ahora se va forjando en este nuevo escenario.
- También has realizado colaboraciones fuera de nuestras fronteras. ¿Qué diferencias destacarías respecto a nuestro país?
PALOMA Entre los improvisadores tengo la sensación de que fuera hay una mayor orientación al trabajo en proceso, a la valoración o reconocimiento del proceso en sí mismo como “objeto” artístico; no encuentro tanto ese ingrediente de querer aferrarse a un estatus o rol artístico como (a veces) aquí. También encuentro fuera, en general, un tejido más diverso y permeable en cuanto a disciplinas (música, danza, artes plásticas, …) implicadas en la improvisación libre como lenguaje de interacción común, y un mayor interés de los unos por los otros (frente a un tejido menos poroso, quizás, que encuentro aquí). Además creo que fuera hay una mayor apertura a lo experimental, tanto por lo que respecta al nivel de respaldo desde las instituciones y espacios como por la acogida e interés desde el público y desde los propios artistas. Sea como sea, estas no dejan de ser impresiones muy genéricas; en lo particular, he encontrado de todo tanto fuera como dentro.
- ¿Qué nuevos proyectos tienes para este año?
PALOMA Seguiré con mis “espacios latentes” al ritmo que pueda ir transitándolos; esta es mi prioridad ahora. Tengo previsto también formar parte del congreso anual CEPI en agosto (Centre Européen Pour L’Improvisation), si la pandemia nos deja. Este año, además, como he
Estudió piano clásico y violonchelo, enfocándose después en la improvisación libre desde 2003. Titulada en ingeniería de telecomunicaciones, dejó este trabajo en 2006 para dedicarse por completo a la música, tanto en su faceta de docente como en la de improvisadora libre. Desde 2014 se forma también en contact improvisación y danza improvisada.
Su foco de interés apunta a la exploración de las sinergias entre sonido y movimiento en el campo de la improvisación libre interdisciplinar.
Es una figura activa en la escena de improvisación libre madrileña, así como partícipe de otras escenas en toda España y Europa.
SOBRE ERNESTO SANTANA
Ingeniero Técnico en Telecomunicaciones en la especialidad de Sonido e Imagen y Diplomado en la ECAM (Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de la Comunidad de Madrid)
Comienza su actividad profesional en el ámbito de la música como técnico de grabación y directo además de músico. Al cabo del tiempo, toma contacto con el mundo del cine. Realiza labores de sonido directo para cortometrajes y publicidad, centrando posteriormente su actividad en el montaje de sonido y mezclas de cine y series. Simultáneamente realiza grabaciones, mezcla y mastering de música en entornos multicanal.
Actualmente compagina estas actividades con las labores de profesor del Módulo Superior De Sonido en el IES Carlos Mª Rodríguez de Valcárcel (Madrid).