1. Parte. Caracteristicas senso-perceptivas del sonido 5.1

La tecnología de sonido envolvente 5.1 está en pleno desarrollo y experimentación

1. Parte. Caracteristicas senso perceptivas del sonido 5.1

Parte primera.

Escrito por Manuel Sánchez Cid – Universidad Rey Juan Carlos *
Anto Jesús Benítez Iglesias – Universidad Carlos III*
*(APCS) Asociación por la Cultura del Sonido
*(GISECOM) Grupo Investigador de Sonido Envolvente y la Comunicación

Sin embargo, muy poco es lo escrito en lo relativo a los aspectos perceptivos de dicho sistema. El presente artículo contempla de forma sencilla algunas valoraciones relativas a los procesos que engloban los rasgos más intangibles de la comunicación radiofónica con sonido envolvente 5.1: desde el proceso de excitación fisiológica hasta la construcción perceptiva de los mensajes. Entender algunas de las principales características de la percepción, significa poder aproximar el principio y fin del proceso comunicativo radiofónico.

Resumen;
La tecnología de sonido envolvente 5.1 está en pleno desarrollo y experimentación. Sin embargo, muy poco es lo escrito en lo relativo a los aspectos perceptivos de dicho sistema. El presente artículo contempla de forma sencilla algunas valoraciones relativas a los procesos que engloban los rasgos más intangibles de la comunicación radiofónica con sonido envolvente 5.1: desde el proceso de excitación fisiológica hasta la construcción perceptiva de los mensajes. Entender algunas de las principales características de la percepción, significa poder aproximar el principio y fin del proceso comunicativo radiofónico.

Palabras clave:
Comunicación Audiovisual; Radio; Espacio Sonoro; Sonido envolvente 5.1;

Abstract:
The technology of surround sound 5.1 is in full development and experimentation. Nevertheless, very little is written in relation to the perceptive aspects of the above mentioned system. The present article is a simple form to evaluate the processes that englobes the most intangible features of the wireless communication with surround sound 5.1: from the process of physiological excitation up to the perceptive construction of the messages. To understand some of the principal characteristics of the perception, means to be able to close by the beginning and end of the communicative wireless process.

Key Words;
Radio; Surround Sound 5.1; Excitation; Sensation; Perception;

Introducción:

Los medios de comunicación han intentado mediante los diferentes avances tecnológicos, crear, reconstruir, o imitar la sensación de un entorno sonoro natural o, al menos, la estimulación, excitación y sensación que éste consigue en el ser humano. La búsqueda narrativa que comprende la recreación de sensaciones espaciales próximas a la realidad es, sin lugar a dudas, uno de los principales objetivos de la tecnología del sonido envolvente.

La radio, por su escaso número de ataduras referenciales –al no estar sometido a un referente físico visual-, favorece una mayor libertad para estimular y excitar sensorialmente, consiguiendo con ello vínculos sinestésicos1 difícilmente igualables. Sin duda, es un medio que favorece la creación y evocación de personajes, objetos y escenarios al precisar la participación activa del individuo receptor lo que la sitúa en una posición de privilegio para la excitación sensorial a través de sus contenidos.

  • 1 La capacidad de estimular e interrelacionar uno sentidos a través de otros.

Sin embargo, la limitación espacial que imponen los estándares tecnológicos de emisión actuales -sistemas mono y estéreo-, la impiden conseguir una sensación de espacialidad comparable al entorno natural, lo que merma de forma notable la integración perceptiva del mensaje, ya que no es equiparable la artificiosa sensación producida por un mensaje sonoro construido con un sistema de representación espacial de eje frontal de 60 grados, frente a la sensación producida por el mismo sonido pero recreado en un campo sonoro con carácter circundante de 360 grados. Considerando que el éxito del mensaje radiofónico se ve influido tanto por los aspectos de la forma sonora como por el carácter emocional de los contenidos y que una podría realzar o atenuar la acción de los otros, es imprescindible reiterar la necesidad de estimular la imaginación del oyente, provocar un vínculo emocional con el mismo y, por supuesto, conseguir reforzar el factor memoria-recuerdo. No obstante, a pesar de asumir que es un medio ventajoso desde un punto de vista comunicativo por su facilidad para estimular sensorialmente y por su extraordinaria capacidad para movilizar la imaginación, una gran mayoría de los creativos y comunicadores radiofónicos parecen priorizar la sensorialidad básicamente a través del texto, relegando e incluso olvidando la capacidad expresiva que ofrece el resto de los elementos sonoros y, en especial, el propio tratamiento de la forma sonora, es decir, el valor añadido que hoy día es capaz de aportar la tecnología.

Por otro lado, es necesario tener en cuenta que el número de hogares españoles preparados para transcodificar mensajes en deliberada construcción espacial envolvente mediante sistemas home cinema, alcanza ya un 12%2, cifra que aumenta progresivamente año a año. Si embargo, podría objetarse que un determinado porcentaje de la audiencia radiofónica realiza una escucha de carácter dinámico, es decir, que no respeta la ubicación o ubicaciones estancas que requiere un sistema sonoro de reproducción espacial envolvente, dificultando así el alcance de la recreación de un espacio de escucha adecuado. Según nos muestra la propia historia de los medios audiovisuales, objeciones y dificultades como éstas nunca han constituido un obstáculo insalvable para que las mejoras tecnológicas de alcance profundo se desarrollasen, promoviendo la implantación de nuevos códigos que mejoran las posibilidades narrativas y la capacidad de penetración de los mensajes en la audiencia, como ejemplo, el paso del sistema mono al estéreo.
Por tanto, el objetivo principal del presente artículo es resaltar que la producción radiofónica con sonido 5.1 consigue un mayor impacto sensorial, siendo claramente capaz de lograr una mayor eficacia comunicativa frente a los sistemas mono y estéreo. Para ello, profundizaremos en algunos los aspectos más significativos del proceso sensorial.

  • 2 Información extraída de la XII oleada del estudio: “Las TIC en los hogares españoles”, Diciembre 2006. Ministerio de Industria.

http://www.pageinsider.com/observatorio.red.es

1. Proceso senso-perceptivo en los mensajes radiofónicos.

Existen divergentes opiniones en lo tocante a la importancia otorgada a la sensación respecto a la percepción en los procesos que pudiesen implicar a la audiencia radiofónica. Nos vemos obligados en este caso, a establecer una mínima explicación aclaratoria que venga a defender la sustancial impronta que la comunicación sonora mediante tecnología envolvente aporta a los mensajes radiofónicos en el sustrato más básico o esencial de la comunicación.

Iremos viendo a continuación cómo el sonido 5.1 es capaz de comunicar eficazmente en ausencia de cualquier intervención de valores añadidos aportados por el intelecto (percepción); resultado de la respuesta positiva generada por la sensación a la intencionalidad del emisor del mensaje -comunicación basada en la relación acción-reacción-. Por supuesto, dicho proceso, valorable en toda estructura comunicativa, en absoluto desdeña la consiguiente carga de profundidad manejable en el proceso perceptivo puro, en el que las valoraciones personales intrínsecas a cada individuo le conceden al mensaje 5.1 otro valor añadido sumatoriamente efectivo.

Para adentrarse en la explicación del proceso, por lo tanto, será necesario enumerar algunos de los aspectos esenciales de la secuencia perceptiva de los mensajes radiofónicos -aunque funcionen igualmente para todos los mensajes sonoros-, la cual viene definida por tres fases: la estimulación, la excitación y la sensación. En todos ellos se establecerá de forma oportuna la significativa relevancia que adquiere el sonido envolvente 5.1 por sus especiales características sensoriales.

1.1 La estimulación.

Los receptores sensoriales son los encargados de captar los estímulos, transmitiéndolos casi simultáneamente al cerebro, donde se transforman en sensaciones. Cuando una persona carece de alguno de los sentidos, se ve privada de las sensaciones correspondientes y sus percepciones resultan perturbadas. Para que exista una sensación son necesarios tanto los estímulos como el procesamiento cerebral primario de los mismos. La estimulación de nuestros órganos sensoriales auditivos viene dada por la relación que el individuo mantiene con su medio. Huelga aclarar que la totalidad de los distintos entornos sonoros poseen características sonoras envolventes, que a su vez son captados por el ser humano desde su cualidad de escucha omnidireccional o de 360º. Contrariamente a lo que algunas personas puedan pensar, aunque el sistema auditivo humano está compuesto por dos pabellones externos para la captación, no se corresponde con una recepción estereofónica, sino que permite la audición y localización de todo sonido generado en un entorno tridimensional de 360º. Por tanto, cuando se construyen mensajes radiofónicos en los sistemas mono o estéreo, debido a su limitación de representación espacial, se hace imposible presentar los mensajes en el concepto omniespacial que nuestro sistema sensorial auditivo permite captar. Esta es una de las principales ventajas del sonido envolvente 5.1: la posibilidad de construir una estimulación espacial sonora sin limitaciones direccionales y, por lo tanto, semejante al oído humano sano. Muy pronto se podrá hablar de una reproducción sonora que albergue variables como la verticalidad y corporeidad del sonido3, lo que significaría obtener un avance tecnológico casi definitivo en el proceso de la estimulación auditiva.

1.2 La excitación
  • 3 Cuestión de la que se ocupa en la actualidad la Asociación por la Cultura del Sonido, formada por investigadores de la UCM, Carlos III y URJC, más la colaboración de organismos concernidos

Toda excitación sensorial o fisiológica supone una alteración física de sus órganos receptores. Los estímulos que llegan a excitar los órganos auditivos obtienen una respuesta automática a nivel fisiológico: las contracciones y dilataciones del tímpano, la transmisión a través de la cadena de huesecillos del oído medio y el posterior proceso generado en el oído interno que es dirigido al sistema nervioso central. Tras de la estimulación, el órgano excitado recupera su estado precedente. La excitación es, pues, una modificación pasajera, seguida por un retorno al equilibrio anterior.

Sin restar la oportuna importancia al grado de excitación fisiológica de los órganos sensoriales auditivos, entendemos que no es posible asociar un nivel de excitación proporcional al de eficacia comunicativa. Efectivamente, el grado de excitación auditiva producido por el mensaje radiofónico no debería encontrar paralelismos en términos de una mayor o menor eficacia, pues ésta, no depende del grado de intensidad en decibelios que aplica el estímulo, ya que un mensaje contenedor de diferentes variables de intensidad sonora puede situar perfectamente la carga significativa y emotiva principal en los pasajes de menor intensidad. Sí se puede decir que un estímulo de mayor intensidad provoca un mayor grado de excitación, para bien o para mal, pero esto no significa de ninguna de las maneras que por ello el mensaje sea más efectivo y, por tanto, más eficaz.

Comunicativamente, concebir la sobredimensión de la excitación sonora de un mensaje radiofónico como sinónimo de efectividad, sólo evidencia un defectuoso proceso de normalización dinámica que desestabiliza la correcta emisión y recepción, además de poder ocasionar un probable rechazo por parte del receptor de la señal. Una estimulación basada en una excitación de alto contraste de forma permanente, tampoco sería una fórmula que pudiese establecerse como algo definitivo. En el entorno cotidiano no se suelen dar de forma continuada sobrecargas de estímulos excitadores, ya que esto provocaría una enorme fatiga, tanto auditiva como atencional, además de generar a la larga, un efecto “costumbre” neutralizador de la atención. Las personas que están inmersas de forma constante en entornos sonoros con niveles de intensidad elevados, por ejemplo: militares realizando ejercicios tácticos, profesionales de la pirotecnia, vecinos próximos a aeropuertos, etc., pierden con el tiempo el efecto “sorpresa” que semejantes sonidos ocasionan en un principio, llegando incluso a mostrar una actitud de cierta indiferencia a dichas estimulaciones de alto nivel, aunque no por ello se pierda la sensación de molestia. Por el contrario, dichas personas son capaces de manifestar una mayor propensión a recibir impulsos novedosos de un nivel de presión sonora mucho menor.

Son numerosos los efectos nocivos ocasionados en la salud por un tipo de estimulación basada en grandes niveles de excitación de forma constante: estrés, insomnio, varices, depresiones, sordera, etc. Como referencia se puede consultar la obra de Guski, R., El ruido4.

En nuestra opinión, construir los mensajes radiofónicos con niveles constantes de excitación muy elevados o, utilizar golpes sonoros reiterativos con la única intención de prevalecer sobre el resto de los contenidos de la programación y así captar la atención del receptor, no sólo no tiene una eficacia muy limitada, sino que es plenamente contraproducente -lo que no significa desechar este tipo de aplicación de forma puntual por necesidad estricta de la narración. Parece más razonable asegurar que la atención se capta por un mensaje cuidado, y sobre todo, por la originalidad, ya sea de contenido, de forma, o por ambas, mientras que el efecto de impacto sonoro constante provoca rutina y desconexión atencional. Además, sería interesante tener en cuenta que por norma general, la señal que sale por el control de continuidad en una emisión radiofónica suele

  • 4 GUSKI, R. (1987), Wirkungen unerwünschter Geräusche, Berna, Verlag Hans Huber, 1987, (Edc. Esp. El Ruido, Efectos de los Sonidos no deseados, Barcelona, HERDER, 1989).

ser limitada o comprimida, lo que a priori neutralizará prácticamente todo efecto sensacionalista buscado mediante un aumento del nivel de presión sonora, igualando en gran medida los niveles de salida de la emisión radiofónica. Por lo tanto, el verdadero efecto de llamada se conseguirá generalmente por la originalidad de los contenidos y por el tratamiento de la forma sonora, pero no por la intensidad de la excitación medida en dB como prioridad. En este sentido, el sonido 5.1 ofrece una diferencia crucial frente a los formatos mono y estéreo: su capacidad para distribuir los estímulos tanto de forma interna como externa al campo de escucha: lo que posibilita un mayor abanico de puntos de emisión permitiendo una distribución más compensada de los niveles de excitación de cada uno de los puntos del campo sonoro.

Un ejemplo de aplicación podría ser una historia construida con sonido envolvente 5.1 donde el oyente estuviese en el punto central del campo de escucha y los acontecimientos se desarrollaran a su alrededor. Por ejemplo, el escenario es un campo de batalla y el oyente está inmerso en el mismo. En distintos puntos a su alrededor se escuchan constantes explosiones con gran nivel de presión sonora, mientras que al cabo de un rato, se puede escuchar un hilo de voz perteneciente a alguien gravemente herido que pide auxilio y lo hace con una expresividad absolutamente desgarradora. La pregunta aquí es: ¿qué sonido llamaría más la atención: el reiterativo de las explosiones sobrecogedoras, o la petición de ayuda? Si la respuesta –que parece de puro sentido común-, fuese la petición de ayuda, entonces podríamos enunciar que , más que el impacto de una fuerte intensidad de la señal, influye el tratamiento narrativo del contenido y de la forma.

La estimulación con 5.1 posibilita una excitación más promediada, inteligible y clarificadora por la menor concentración de estímulos; o dicho de otro modo, por su mayor capacidad de distribución espacial de las fuentes. Implícitamente, por tanto, la cobertura de estímulos lograda por un mensaje construido en 5.1, consigue una excitación más completa y precisa, consecuencia directa de la distribución de puntos focalizadores de la acción.

Fin Parte primera.