Respecto a la elección de las luminarias, Espada ha señalado que ‘hemos tenido que tener muy presente la escasa densidad de niebla en escena, un handicap que debemos afrontar en más de una ocasión’. Para conseguir el resultado deseado bajo la condición atmosférica presente a lo largo del tour, ‘hemos optado por focos con un fuerte brillo y alta potencia’, destacando que ‘ha resultado muy sencillo gracias al VL3500 Wash y al Pointe’.
Ha añadido que el contar sobre el escenario con una orquesta sinfónica, ‘podía llevarnos a imaginar escenas estáticas con un suave tracking marcadas por un ritmo clásico. Pero sobre el escenario teníamos al gran Raphael, y es ahí donde el amplio abanico de efectos, versatilidad y posibilidades de las luminarias elegidas ha marcado la diferencia’, con cuyo resultado ‘estamos muy satisfechos’.
Un entregado público ha podido disfrutar así del talento de Iván y la voz y carisma de Raphael como tándem perfecto para unas actuaciones inolvidables